No es un secreto para nadie, que hay grandes diferencias entre los sexos, desde nuestras formas de ver el mundo hasta los modos en los que pensamos.
Si bien en algunos casos esa diferencias son más radicales que en otros, hay algunas claves a tomar en cuenta para que descubras el verdadero significado de la famosa frase “No pasa nada” de las mujeres.
1. Que realmente no hay inconveniente alguno.
2. Estoy celosa. Llevas toda la fiesta o cena hablando con otra mujer (ya sea presencial o digitalmente) y no me lo estoy pasando nada bien. No importa que sea amiga, ex, desconocida o monja de claustro.
3. Eres un egoista. Me he esforzado por prepararte una cena rica y te la has zampado sin ni siquiera darte cuenta de que se trataba de algo para compartir. Para colmo, destapas el vino para servirte una copa y ni se te ocurre sacar una segunda copa para mí.
4. Haces siempre lo que quieres. “Hola mi amor, me acaban de invitar al estadio, ya estoy aquí con todos, no te importa, ¿verdad? Por cierto, ¿cómo te fue con tu mamá?” Y yo ya estaba esperándote en la tienda de muebles donde habíamos quedado de vernos. Compro el comedor, hago que lo instalen y cuando llegas del partido no te percatas y todavía me preguntas que qué me pasa.
5. Esperaba que lo hicieras sin tener que pedírtelo. Suelo llegar a casa antes que tú y siempre te espero para cenar. Un día llegas antes que yo y cuando llego estás terminando de cocinar cena para uno. Gracias.
6. Eres un inútil. Te pido una sola cosa (3 limones para el pie que voy a preparar para la comida de mañana con tu familia, el carbón para el bbq con los amigos, que saques la ropa de la secadora…) y siempre hay algo que se atraviesa en tu camino y que te impide hacerlo. O, aún peor, llegas con algo que no te pedí.
7. Parece que no me conoces. Llegas de viaje y me enternece mucho que me hayas traído un regalo. Pero, ni ésa es mi talla, ni te acordaste de que soy alérgica al nylon.
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